En esta meditación, Abelardo de Armas nos muestra a María y a José camino de Belén. Van en recogimiento, sintiendo los efectos de la pobreza. Sus pasos, más que a Belén, se dirigen a Dios, que es hacia donde caminan los santos. Nos enseñan también a amar el sacrificio, la humillación y la pobreza, ¡imitémosles!