Con motivo del 850 aniversario de la canonización de S. Bernardo, que tendrá lugar en 2024,
H.M. Televisión ha querido producir un nuevo documental: La llama de Europa: San Bernardo de Claraval.
San Bernardo fue conocido como "Mellifluous Doctor" (boca de miel) por su gran elocuencia. Famoso por su gran amor a la Virgen María. Compuso muchas oraciones marianas.
¿Por qué ahora?
Porque en estos tiempos convulsos que vivimos se necesitan faros luminosos y potentes que sean capaces de alumbrar la meta en medio de la oscuridad y la tormenta. San Bernardo es una personalidad arrebatadora, con un carisma irresistible, que sigue siendo actual hoy y que arrastra a entregarlo todo con generosidad. Una vida que nos ayuda a tomar conciencia de que Dios suscita hombres y mujeres en todos los tiempos capaces de salir al paso de las necesidades, cambiando el rumbo de los acontecimientos, y ello es motivo de esperanza hoy.
Su vida y su ejemplo son una potente llamada a una radical defensa de la Verdad, a un despertar de este adormecimiento y pasividad que nos atenaza cuando hemos sido llamados por Dios a cosas tan grandes como no hubiéramos podido soñar. En definitiva S. Bernardo es un motor de esperanza para los tiempos actuales.
En 2024 festejaremos el 850 aniversario de la canonización de S. Bernardo, que tuvo lugar en 1174, por ello este documental pretende ser un adelanto para dicha conmemoración.
INTERVIENEN
D. Francisco Casas
Párroco del Monasterio de la Santa Espina
«El 20 de agosto de 1153, hace nueve siglos, en un monasterio de la meseta de la alta Borgoña en Francia, se entregaba a Dios un monje. Las multitudes, al enterrarse del rumor de esta noticia, se acercaban a las puertas del monasterio y llamando preguntaban cómo había sido su vida. Su fama de santidad se extendió hasta los confines de la tierra. ¿Quién era este hombre? Era un monje cisterciense: Bernardo de Claraval».
P. Pierre-André Burton
Abad del Monasterio de Citeaux
«La juventud feudal de la nobleza del siglo XII se vio sin duda seducida por lo que San Bernardo proponía como búsqueda espiritual, la búsqueda de Dios en la unificación de toda la persona, es decir, corazón, inteligencia y memoria.»
Mons. Juan Antonio Reig Pla
Obispo Emérito de Alcalá de Henares
«San Bernardo es un hombre inquieto que busca a Dios. A Dios lo va a encontrar por donde Dios quiere ser encontrado, y en este caso en la Sagrada Escritura, lo que se llamaba, entonces, la Sacra pagina.»
Bar. Jacques de Mandat de Grancey
Escritor e Historiador
«Lo importante de la relación entre Bernardo y Grancey es que fue aquí donde declaró su vocación a su familia, con ocasión de un asedio a la fortaleza.»
P. Santiago Cantera Montenegro
Doctor en Historia Medieval por la Universidad Complutense de Madrid y Prior de la Abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos
«San Bernardo, se fija muchas veces en escenas de la vida de Jesús y especialmente en la imagen de Cristo crucificado. Impulsa, con otros autores también, esta devoción a las llagas de la pasión de Cristo. Nos da a entender, también, a veces cómo se puede llegar al corazón de Jesús. Se fija en Jesucristo como verdadero Dios y como verdadero Hombre. A través de la humanidad de Cristo podemos llegar a descubrir el misterio de su divinidad.»
P. Roberto de la Iglesia
Abad del Monasterio de San Pedro de Cardeña
«Cuentan que san Bernardo durante su noviciado en el Císter, cuando le venían momentos de debilidad o de crisis o demás, él mismo se decía a sí mismo: Bernard Bernard at qui venistis? O sea: ¿Bernardo Bernardo a que has venido? Y eso le suponía como un revulsivo en su decisión de seguir a Cristo, en esta forma de vida bastante dura y difícil como era el císter en sus primeros años. La respuesta de san Bernardo es eso: el volver otra vez al fervor inicial».
Dña. Margarita Torres Sevilla-Quiñones de León
Doctora en Historia Medieval por la Universidad de León
«San Bernardo es el gran referente del siglo XII en la espiritualidad bajo medieval y europea. No solamente es el hombre que está destinado a cambiarlo todo con su fuerza, con su presencia, con su conocimiento, sino que también es una persona que por su origen nobiliario está muy vinculado con el mundo de aquel tiempo, a nivel político, social, etc.»
D. Gerard Beureux
Vicepresidente de la Asociación Renaissance de Clairvaux
«Los comienzos en Claraval fueron bastante difíciles, pero Bernardo tenía una gran voluntad, se alojaron en viviendas pobres, casi se las podría llamar chozas. Sin embargo, hay una primera iglesia que construyeron dignamente, se construyó una estructura sólida con bastante rapidez. Y esta primera ocupación durará 20 años.»
Don Guillaume Chevallier
Sacerdote de la Parroquia de Fontaine-les-Dijon
«Bajo la influencia del recuerdo de su madre Alette, Bernardo se da cuenta de que se está convirtiendo en una persona mundana, y decide de rodillas, llorando, rezando, entregar su vida al Señor Jesús radicalmente, y hacerse monje, un monje pobre en Cîteaux.»
«Debemos amar a Dios porque Él es Dios, y la medida de nuestro amor debe ser amarlo sin medida.»
«Si se levanta la tempestad de las tentaciones, si caes en el escollo de las tristezas, eleva tus ojos a la Estrella del Mar: invoca a María!»
LUGARES
Castillo de Fontaine
Castillo del siglo XI (profundamente alterado a lo largo de los siglos) en Fontaine-lès-Dijon cerca de Dijon en Côte-d'Or, Bourgogne-Franche-Comté.
El castillo y la iglesia contigua fueron construidos en 1090 en el lugar de nacimiento de Bernardo de Claraval.
Iglesia de Saint Vorles
Iglesia románica que es la joya más bella de Châtillon-sur-Seine: su construcción, atribuida al obispo de Langres, Brun de Roucy, se inició en el siglo X. Se dice que aquí se realizó el milagro de la lactancia: Bernardo de Claraval, que ingresó en la escuela de monjes de Châtillon, recibió tres gotas de leche del pecho de la estatua de la Virgen ante la que rezaba.
Castillo de Grancey
El castillo de Grancey, conocido como el pequeño Versalles de Borgoña, domina orgullosamente la llanura desde su espolón rocoso. Antes de ser el edificio de estilo clásico que conocemos en la actualidad era una importante fortaleza medieval, que fue asediada y arrasada por los duques de Borgoña. De esta época todavía subsiste una puerta fortificada del siglo XIII, restos de murallas y las chimeneas del gran salón.
Abadia de Citeaux
Fundada en 1098 por San Roberto, abad de Molesme, en una parte desierta y deshabitada de la diócesis de Châlons-sur-Saône, hoy la diócesis de Dijón (Côted’Or, Francia), distante 19km de esta última ciudad.
Allí, San Roberto y sus compañeros, en número de veintiuno, pusieron los cimientos de la Orden de Cîteaux, y comenzaron la observancia literal de la Regla de San Benito.
Claraval
La abadía de Claraval es un monasterio cisterciense fundado en 1115 por San Bernardo de Claraval, situado en la localidad francesa de Ville-sous-la-Ferté, en el departamento del Aube.
La abadía fue reconstruida en 1700, conservándose el dormitorio de los legos.
Desde 1808 fué destinada a prisión.
Abadia de Fontenay
La abadía de Fontenay es una abadía francesa de Marmagne (departamento de Côte-d'Or), uno de los monasterios más emblemáticos de toda la arquitectura cisterciense. Bernardo de Claraval lo fundó mediante filiación, enviando monjes de su abadía de Claraval, y su construcción, muy bien conservada, sirvió de modelo durante la importante expansión cisterciense en Europa en los dos siglos posteriores.
Lugar donde predico la Segunda Cruzada
En 1144 Edesa había sido tomada por los turcos;. Encontramos la razón para la Segunda Cruzada, la recuperación de Edesa, que había sido tomada por los turcos y formaba parte de uno de los lugares en donde se encontró uno de los iconos de la cristiandad, la Sabana Santa o Sudario de Cristo. El predicador legitimo fue Bernardo de Claraval.
La predicación de la cruzada se realizaría en Vezelay (Francia), Bernardo se dirigiría a los asistentes, leería la bula papal de la cruzada y su discurso lleno de vehementes palabras en la que defendería la verdadera fe, provocaría que los asistentes gritaran la frase ya unida a la cruzada de ¡Dios lo quiere!.
Abadia de Pontigny
La abadía de Pontigny es una abadía cisterciense, situada en Pontigny, en el departamento de Yonne, Francia. 1
Fundada en 1114, fue la segunda de las cuatro grandes casas hijas de la Abadía de Citeaux. San Esteban envió a doce monjes bajo la dirección de Hugo de Mâcon , el primer abad y amigo y pariente de Bernardo de Claraval, para establecer la nueva fundación. Bajo el abad Hugo y su sucesor, Guichard, el nuevo monasterio desarrolló tal reputación de santidad que atrajo a un número suficiente para poder establecer otros veintidós monasterios cistercienses.
