banner el sacerdote

"El sacerdote" te quiere ayudar a comprender la grandeza del ministerio que Dios ha confiado a algunos hombres que Él mismo ha elegido, para prolongar su misión en el mundo.
"El mismo Señor, para que los fieles se fundieran en un solo cuerpo [...], entre ellos constituyó a algunos ministros, para ofrecer el sacrificio y perdonar los pecados, y desempeñar públicamente, en nombre de Cristo, la función sacerdotal en favor de los hombres" (Presbyterorum Ordinis, nº 2).

Bloques

 
 
 

Último vídeo

En este primer programa de «El Sacerdote», el P. José María Alsina Casanova nos habla sobre el sacerdocio y de cómo este es un reflejo del mismo Corazón de Cristo. Sólo se puede comprender el sacerdocio desde el amor inmenso de Jesús y desde el amor con el que Él se ofrece como víctima por nosotros al Padre. Los signos del Corazón de Jesús caracterizan la entrega total del sacerdote que debe dar la vida hasta el final unido a la cruz, siendo capaz de compadecerse de los pecadores y sabiéndose llamado a arder en el fuego del amor de Cristo.

Recientes

Jesucristo se quedó por ti

Nos quejamos muchas veces de que nuestra vida es muy difícil y no tenemos fuerzas para continuar, pero pocas veces acudimos a la fuente de la vida. ¿Cuál es esa fuente? ¿Dónde se encuentra? D. Santiago Arellano, sacerdote de la «Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón», en este programa nos acerca a esa fuente: la Eucaristía. Dios se quedó en el Santísimo Sacramento por ti y desea darte la fuerza que necesitas. Pero, si no vas ni un minuto siquiera a adorarle ni te acercas al sacramento de la confesión para tener un alma digna de recibirle, ¿cómo quieres que Él te ayude?, por tanto, ¿a qué esperas para volver a Él?

Dios no quiere tu condenación

El sacramento de la confesión no es para satisfacer la curiosidad de los sacerdotes, ya que deben guardar el sigilo sacramental, que les obliga a guardar silencio de todo lo que escuchen. Este sacramento es para limpiar tu alma. D. Santiago Arellano, sacerdote de la «Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón», a través de este programa nos muestra, desde su propia experiencia, cómo Dios busca a la oveja perdida no para pegarla, sino para curarla y devolverla al redil del que se extravió. Dios se hizo hombre para morir en la cruz por ti, y así, pagar la deuda de tus pecados. Él espera tu conversión, ¿vas a rechazar su Misericordia?

Orar es una necesidad vital

D. Santiago Arellano, sacerdote de la «Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón», ha experimentado en su propia vida el desorden que produce para el alma no hacer oración. El alma se va alejando de Dios y acaba por vaciarse completamente. ¿Quieres conocer a Dios y saber qué es lo que está torcido en tu vida? Haz oración diariamente frente al Santísimo. Ahí encontrarás a un Dios cercano que siempre te escucha y quiere ayudarte a cambiar. Pero para cambiar, es necesario que tú también le escuches a Él.

Jesucristo nos mandó predicar

El sacerdote tiene como misión principal predicar el Evangelio. Por ello, el sacerdote debe dejar al margen de su predicación tanto sus gustos como sus opiniones personales. La palabra de Dios nos fue revelada por Él mismo de una forma concreta y así es como debe comunicarse a las almas, sin modificarla. D. Santiago Arellano —sacerdote de la «Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón»— anima a sacerdotes y fieles a ser verdaderos testigos de Jesucristo, sin máscaras, sin miedo al qué dirán ni a quedarnos solos. Tenemos que predicar la palabra de Dios con valentía.

El amor del Corazón de Jesús

D. Santiago Arellano, sacerdote de la «Hermandad de Hijos de Nuestra Señora del Sagrado Corazón», no deja de asombrarse de las gracias que Dios, a través del don sacerdotal, derrama sobre las almas. El Señor ha dejado sobre las manos limitadas del sacerdote la guía de su rebaño y la administración de los sacramentos para que las almas puedan santificarse. Ante esta importante misión, D. Santiago pide humildemente a todos los oyentes que recen por los sacerdotes para que no se despisten de su misión y se mantengan fieles a Dios hasta el final.

La fe eucarística de la Iglesia

Para D. Luis F. Ochoa de Aranda, sacerdote de la Archidiócesis de Valencia (España), celebrar y recibir la Eucaristía diariamente es algo esencial. Si el sacerdote quiere identificarse verdaderamente con Jesucristo, no puede prescindir de este Sacramento. Hoy muy poca gente sabe el misterio que se contiene en la Hostia consagrada: Dios mismo baja a su alcance para santificar sus almas, pero, están tan desorientados por el mundo, que no solo no acuden a este Sacramento sino que lo desprecian. Como cristianos no podemos quedarnos indiferentes ante esta situación. Tenemos que cumplir la misión que se nos ha encomendado de defender y dar a conocer este misterio.

  • D. José García Hernández —sacerdote de la Diócesis de Alcalá de Henares—nos explica el verdadero significado del celibato sacerdotal, signo de entrega sin reservas a Cristo, para lo cual es necesario que el sacerdote tenga un corazón indiviso, es decir, sin divisiones, solo y exclusivamente para Dios. La misma entrega, el mismo amor que un marido pone en su mujer y en sus hijos, el sacerdote lo tiene que poner con toda la Iglesia. Y por ello, D. José García Hernández nos invita a preguntarnos: «¿Por qué al sacerdote se le pide amar tanto?».

     

     

Documentales

Documentales

Cortometrajes

Cortometrajes

¿Cómo puedo ayudar?

Gracias a la generosidad de nuestros bienhechores, hemos podido seguir hasta ahora. Pero las exigencias van siempre en aumento y con frecuencia surgen gastos imprevistos, como reparaciones, adquisición de nuevas máquinas, etc.
Más información aquí.

Colaboramos con:

proclericis          ewtn
CultuDivino           ain

Newsletter